La startup de baterías Enerpoly recurre a exempleados de Northvolt

La tecnología de iones de zinc de Enerpoly se basa en una innovación que permitirá fabricar pilas recargables con los mismos materiales que las pilas alcalinas normales. (Energía)

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La startup sueca Enerpoly AB reclutó a dos ex ejecutivos de Northvolt y compró una línea de producción a un competidor en quiebra, en un intento por convertir las baterías alcalinas comunes en una opción rentable para el sector del almacenamiento de energía.

La empresa con sede en Estocolmo, fundada en 2018, espera iniciar la producción a finales de este año o principios de 2025, tras haber adquirido maquinaria del patrimonio de la extinta Nilar AB, dijo en una entrevista la directora ejecutiva, Eloisa de Castro. La empresa también contrató los servicios de las exalumnas de Northvolt AB, Annika Werneman y Emelie Tillegard, como jefas de fabricación e industrialización, respectivamente.

Los planes de expansión de Enerpoly surgen mientras un gran grupo de nuevas empresas están desarrollando lo que esperan sea el próximo gran avance para ayudar a la electrificación. La incertidumbre ya está alimentando los problemas en el floreciente sector de baterías de Suecia, con Northvolt luchando por aumentar la producción en su primera planta y el candidato a cotizar en bolsa Polarium Energy Solutions AB destituyendo a su director ejecutivo después de acumular pérdidas. Mientras tanto, Nilar se declaró en quiebra a finales del año pasado a pesar del apoyo de los inversores, incluidos los fondos de pensiones estatales.

«Se necesitan muchas tecnologías diferentes en este mercado», dijo de Castro.

«La tecnología de baterías de la empresa es una de las pocas que podría haber utilizado el equipo de fabricación que adquirimos de Nilar», añadió. «Así que esta fue una oportunidad para nosotros, pero no lo habría sido para todas las demás empresas de baterías».

Enerpoly, que ha recaudado casi 17 millones de dólares hasta ahora, planea una planta con una capacidad de 100 megavatios hora por año que puede servir como modelo para la fabricación de gigafábricas en el futuro, según el director general. Su tecnología de iones de zinc se basa en una innovación que facilitará la producción de pilas recargables a partir de los mismos materiales que las pilas alcalinas normales fabricadas por empresas como Duracell Inc. y Varta AG.

“Trabajar con zinc y dióxido de manganeso es interesante porque son materiales muy abundantes, muy baratos y con precios muy estables”, afirmó de Castro. «La lista de materiales suele representar entre el 60% y el 80% de los costos de las baterías, por lo que lo que hay que hacer para obtener costos de venta de baterías atractivos y poder abordar una gran parte del mercado es aumentar la escala y tener una buena lista de materiales».